El césped artificial tiene un gran parecido con el césped natural, pero su mantenimiento es mucho más sencillo, ya que se trata de una moqueta sintética.
Un aspecto importante del césped artificial es que tiene gran capacidad de drenaje, lo que nos aleja del riesgo de charcos e irregularidades y nos garantiza una textura suave, debido a su relleno de una mezcla criogénica. También es importante destacar que el césped artificial proporciona aislamiento térmico.
La vida útil del césped artificial suele rondar entre los 10 y los 15 años, dependiendo de la calidad de la fibra, aunque puede verse disminuida considerablemente si no lo cuidamos bien, por ello es necesario llevar a cabo un mantenimiento periódico.
El césped artificial es resistente al paso de tiempo y a los cambios climatológicos, aguanta perfectamente el sol, ya que está protegido contra los rayos UV por lo que se puede instalar tanto en espacios al aire libre o en interiores.
Una importante ventaja del césped artificial frente al césped natural es el ahorro de agua, ya que el cuidado y mantenimiento del césped artificial exige un gasto mínimo de agua, con echar una poca agua durante dos minutos cada dos días es suficiente.
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Césped artificial instalado
Hay diferentes tipos de césped artificial, dependiendo del uso que pretendamos darle deberemos elegir unos u otros, ya que cada uno cuenta con unas características determinadas y específicas según su finalidad.
Se puede escoger entre rollos precortados o bobinas al corte. Para superficies pequeñas, en el caso de usar rollos, hay que tratar de hacer el menor número de cortes y juntas posible. Para terrenos por encima de los 30 m2 es recomendable emplear bobinas de 2 y 4 m de ancho.
Hay dos grandes tipos de césped artificial:
En las instalaciones deportivas el césped artificial debe ser mucho más resistente y estar preparado para un uso mucho más fuerte, ya que su desgaste es considerablemente mayor.
El mantenimiento es muy importante en el césped artificial, pero si este está destinado a un uso deportivo, su mantenimiento es aún más importante, ya que su falta de mantenimiento puede acarrear problemas físicos en los jugadores, dificultades en el desarrollo del juego y el propio desgaste del césped artificial.
Si vamos a ponerlo sobre un terreno natural, primero debemos nivelar y fumigar la zona, para evitar que aparezcan malas hierbas. Luego tenemos que poner gravilla y arena para poder facilitar el drenaje posteriormente y compactar los materiales para que la superficie nos quede llana.
Posteriormente, debemos poner una malla Geotextil, que se encargará de filtrar y drenar el césped, y extender encima la moqueta, procurando no dejar pliegues. En este punto del proceso es cuando tenemos que pegar el césped artificial, usando para ello adhesivos de poliuretano especiales para esta tarea.
En el caso de que el césped no lleve arena de sílice, lo que deberíamos hacer es cubrirlo todo con arena de sílice, para lastrar la moqueta y alzar las fibras y que se queden erguidas.
Mantenimiento: consejos
Debemos recordar que el césped artificial es un pavimento sintético de exterior, por lo que se ensucia de estar al aire libre. Para mantenerlo limpio y mejorar su conservación debemos llevar a cabo una serie de tareas de mantenimiento que ayudarán a que nuestro césped artificial se encuentre en buenas condiciones con el paso del tiempo.
Para recoger las hojas que puedan caer sobre el césped artificial es aconsejable usar un rastrillo húmedo, de esta forma se pueden recoger las hojas con poco esfuerzo y sin dañar el césped.
El césped artificial debe ser cepillado con un cepillo de cerdas duras de plástico.
La frecuencia del cepillado depende del uso que se le dé al césped, lo aconsejado es semanalmente. No hay que dejarlo pasar, ya que la falta de mantenimiento durante un tiempo prolongado puede provocar que el césped artificial se aplaste y ya no haya manera de solucionarlo.
Si la arena de sílice se desplaza de su lugar y aplasta las fibras del césped, deberemos cepillar a contrapelo y lastrar la superficie para que las fibras recuperen su forma y la superficie luzca regular y con volumen. Aunque no nos veamos en esta situación, es recomendable cepillar a contrapelo una vez al mes.
Cuando hace mucho calor, el césped artificial se calienta, por lo que es recomendable echarle un poco de agua para bajar su temperatura y mantener el espacio un poco más fresco. La arena de sílice se encargará de retener la humedad.
Como contrapunto, el exceso de humedad puede hacer que aparezcan hongos, en ese caso usaríamos productos fungicidas suaves o diluidos en agua.
Si bien en verano se recomienda refrescar el césped artificial, cuando las temperaturas están bajo cero está totalmente contraindicado regar, ya que con el tiempo el hielo va desgastando las fibras de latex del césped artificial.
Una recomendación importante es no dejar el coche aparcado encima del césped artificial, y mucho menos de manera continua. Si alguna vez cae algún tipo de fluido del coche al césped, lo limpiaremos de la forma habitual, pero si eso pasara de forma continua el césped podría llegar a decolorarse.
El césped artificial tiene una fácil recuperación, así que no hay ningún tipo de problema en cuanto a poner muebles de jardín encima, cuando queramos quitarlos cepillamos el césped y quedará como nuevo. Es importante no arrastrar los muebles para moverlos, ya que eso podría hacer que saltaran algunas fibras y que quedaran algunas zonas peladas.
El césped artificial es resistente a los rayos UV, pero no lo es al acercamiento a las fuentes de calor, es ignífugo, pero superados los 80º comienza a derretirse.
Limpieza “ordinaria” del césped artificial
Para quitar el polvo que se va acumulando en el césped artificial es suficiente con regarlo con una manguera. De vez en cuando podemos usar un higienizador o algún tipo de producto químico rebajado para deshacernos de los bichos y de las bacterias que pudieran generarse.
Limpieza de manchas del césped artificial
Es necesario limpiar las manchas cuanto antes, ya que dejamos pasar el tiempo las manchas se van impregnando más y más en las fibras del césped artificial y cada vez se hace más difícil deshacerse de ellas. Si nos encontramos con una mancha concreta, será suficiente con frotar el césped artificial con una mezcla de agua y jabón y aclararlo después. Si tenemos una mancha un poco más difícil de quitar, usaremos una mezcla de vinagre de vino blanco en agua y aclararemos. Si después de haber intentado todo lo anterior la mancha persiste, tendremos que aplicar una mezcla de agua con un 3% de amoniaco y aclarar con agua.
En el caso de encontrarnos con un chicle pegado en el césped artificial, es aconsejable aplicar hielo.
Deterioro
En el caso de que la arena se acumule en un sitio, se desplace o disminuya la cantidad, deberemos cepillar y regar la superficie, para inmediatamente después echar una nueva capa de arena para que el césped se mantenga erguido. Este procedimiento también podremos llevarlo a cabo en el caso de que el césped esté instalado mucho tiempo.
En el caso de que el césped se quede chafado y no se solucione peinándolo, deberemos rellenar los huecos vacíos con otra capa de arena de sílice para conseguir que el nivel de carga sea equitativo y, por tanto, que las fibras de nuestro césped artificial queden erguidas.
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